Las semillas de calabaza y las semillas de ajonjolí introducidas por los españoles se unen en un dulce de textura fabulosa, también algunas veces llamado palanqueta. Si se dan los dulces como regalos, envuélvalos individualmente en papel celofán, retuerza las puntas y amárrelas con listón chino.
Ingredientes
- 1 libra de piloncillo (azúcar morena de barra) en trozos
- 2 tazas de agua
- 1 taza de semillas de calabaza crudas, sin cáscara
- 1 taza de semillas de ajonjolí, ligeramente tostadas
Manera de hacerse
Coloque el piloncillo y agua en de una olla gruesa y permita que hierva. Baje a media flama y cocine el jarabe, moviéndolo frecuentemente con una cuchara de madera, hasta que llegue a los 245° F en un termómetro para dulces.
Mientras el jarabe se cocina, ponga las semillas de calabaza en un comal seco hasta que casi todas se hayan hinchado y tronado. Mueva suavemente el comal mientras hace esto, pero tenga cuidado con las semillas que a veces “saltan” del comal.
Cuando el jarabe haya alcanzado los 245° F, inmediatamente remuévala de la flama e incorpore las semillas de calabaza y semillas de ajonjolí.
Vierta cucharadas en papel encerado. Permita que se enfríen completamente antes de envolverlas en papel celofán o papel encerado. Rinde 24.
NOTA: El piloncillo puede ser muy duro, así que para romperlo en pedazos pequeños, los cuales se derriten mas rápido, lo envuelvo en una toalla limpia y lo golpeo con un martillo. Probablemente nunca verá esto en programas de televisión, pero funciona.
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